La novela relata la historia de  Kim Ji-young (nombre muy común entre las mujeres coreanas nacidas en 1982), una mujer que lleva una vida normal desde los cánones de la sociedad a la que pertenece. Se hace cargo de la crianza de su hija y de las tareas del hogar. Un día su esposo empieza a percibir que actúa de manera extraña. ¿Cómo ha llegado a esa situación? 

A partir de ese momento conocemos su historia de vida, a lo que ha tenido que enfrentarse y podemos entender un poco mejor lo que viven y enfrenta Kim Ji-young y tantas otras mujeres.

POR QUÉ LEER ESTE LIBRO

  • Se ha convertido en un referente para el movimiento feminista en Corea del Sur y Asia en general
  • Es una radiografía de la desigualdad entre hombres y mujeres en sociedades que aparentemente parecen ir avanzando. Visibiliza conductas y prejuicios tan normalizados, que nos ayuda a tomar conciencia de que la lucha por la igualdad de oportunidades sigue siendo una tarea pendiente.

ALGUNOS PÁRRAFOS SIGNIFICATIVOS

“Ciertamente es el trabajo perfecto para compatibilizar con el cuidado de los hijos. Entonces, es un buen trabajo para todos, no solo para la mujer, ¿no? ¿Acaso los hijos los tiene solo la mujer? Mamá, ¿vas a decirle lo mismo a tu hijo? ¿A él también lo vas a enviar a una universidad pedagógica?”

“Ni siquiera yo sé si me casaré o tendré hijos. O puede que me muera antes. ¿Por qué tengo que renunciar a lo que quiero ser o hacer por un futuro que no sé si llegará?”

CON UNA MIRADA DE APÓSTOL

Superar estereotipos y prejuicios

A través de la vida de Kim Ji-young vamos reconociendo vivencias que forman parte de la vida de muchas mujeres durante su niñez, juventud y adultez: el miedo por la inseguridad, la imposición de reglas familiares y sociales, los prejuicios por la forma de vestir o comportarse, la desigualdad de oportunidades, etc. El libro nos pone ante un espejo donde mirarnos. A pesar de ser una cultura muy distinta, lo que nos narra no nos resulta tan extraño. 

Trata de identificar todos aquellos hábitos y costumbres que te rodean y que provienen de un prejuicio, de una mirada que discrimina. Es difícil reconocerlos cuando los hemos hecho costumbre, cuando convivimos con ellos y forman parte de lo normal o convencional. ¿En qué te interpela este libro? ¿Ante qué situaciones de tu entorno has de alzar la voz, no darlas por sentado?